Con seleccion y prólogo de Alberto Curbelo.
Leopoldo Eugenio Hernández Espinosa.[Habana 1936]. Uno de los más importantes dramaturgos cubanos contemporáneos. Director artístico y Director General del Teatro Caribeño. Su teatro se distingue por las exploraciones en la cultura popular y en las tradiciones afrocubanas. A su intelecto se le deben obras del Caribe como: Maria Antonia, Calixta Comité y Mi Socio Manolo; tiene además piezas que recrean la mitología yoruba. Su obra es representativa de lo viejo del arte popular en Cuba. Su literatura dramática festeja lo popular, con una mirada que evade prejuicios y estereotipos, mientras recrea la mitología de origen yoruba con su narratividad, símbolos y deidades. Su obra María Antonia, considerada entre las más importantes piezas teatrales cubanas de la segunda mitad del siglo XX, es fiel exponente de ello. Es un teatro de intensa preocupación social y recurrente tono filosófico. El teatro de Eugenio Hernández ha trascendido lo efímero de las tablas y ha pasado a la cinematografía nacional. Mi socio Manolo dio lugar al filme La vida inútil de mi socio Manolo, dirigido por Julio García Espinosa, (ICAIC) 1989, mientras en la mítica María Antonia teatral se basó el filme homónimo dirigido por Sergio Giral (ICAIC), 1990. También fue coguionista de los filmes Patakín (1982), Roble de olor (2003), y del libreto cinematográfico de El Mayor. Ha impartido talleres y conferencias sobre dramaturgia para teatro y cine en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños.
Con seleccion y prólogo de Alberto Curbelo.
Leopoldo Eugenio Hernández Espinosa.[Habana 1936]. Uno de los más importantes dramaturgos cubanos contemporáneos. Director artístico y Director General del Teatro Caribeño. Su teatro se distingue por las exploraciones en la cultura popular y en las tradiciones afrocubanas. A su intelecto se le deben obras del Caribe como: Maria Antonia, Calixta Comité y Mi Socio Manolo; tiene además piezas que recrean la mitología yoruba. Su obra es representativa de lo viejo del arte popular en Cuba. Su literatura dramática festeja lo popular, con una mirada que evade prejuicios y estereotipos, mientras recrea la mitología de origen yoruba con su narratividad, símbolos y deidades. Su obra María Antonia, considerada entre las más importantes piezas teatrales cubanas de la segunda mitad del siglo XX, es fiel exponente de ello. Es un teatro de intensa preocupación social y recurrente tono filosófico. El teatro de Eugenio Hernández ha trascendido lo efímero de las tablas y ha pasado a la cinematografía nacional. Mi socio Manolo dio lugar al filme La vida inútil de mi socio Manolo, dirigido por Julio García Espinosa, (ICAIC) 1989, mientras en la mítica María Antonia teatral se basó el filme homónimo dirigido por Sergio Giral (ICAIC), 1990. También fue coguionista de los filmes Patakín (1982), Roble de olor (2003), y del libreto cinematográfico de El Mayor. Ha impartido talleres y conferencias sobre dramaturgia para teatro y cine en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños.
