Berenice presenta el diseño esencial de la poética raciniana. Se da en ella más de una renuncia de amor. La tragedia surge de una negativa de todo desorden; una elegancia definitiva en la acción es conseguida a expensas de la vida. Es un milagro que una concepción del arte y del comportamiento tan peculiar y cerrada haya producido algunas de las piezas teatrales más soberbiamente fascinantes que conozca la literatura. Vastas energías son comprimidas hasta un punto de inflamación y luego se las libera definitivamente en forma asesina, explosiva. (...) En el escenario desnudo de Berenice o de Fedra, minúsculos cambios de tonalidad son los resortes básicos de la tragedia. George Steiner
Berenice presenta el diseño esencial de la poética raciniana. Se da en ella más de una renuncia de amor. La tragedia surge de una negativa de todo desorden; una elegancia definitiva en la acción es conseguida a expensas de la vida. Es un milagro que una concepción del arte y del comportamiento tan peculiar y cerrada haya producido algunas de las piezas teatrales más soberbiamente fascinantes que conozca la literatura. Vastas energías son comprimidas hasta un punto de inflamación y luego se las libera definitivamente en forma asesina, explosiva. (...) En el escenario desnudo de Berenice o de Fedra, minúsculos cambios de tonalidad son los resortes básicos de la tragedia. George Steiner